CRÍTICA: «Principiantes totales», made in Polonia

Netflix sabe que gran parte de sus suscriptores son amantes de las tramas adolescentes y por eso, el gigante continuamente está agregando proyectos juveniles a su catálogo… Esta vez ha sido el turno de «Principiantes totales», una serie llena de drama y romance «made in Polonia», la cuál está disponible desde octubre del año pasado.

¿De qué va?

Esta producción original de la plataforma de la «N» sigue a los mejores amigos: Lena y Niko. Ellos pasan siempre los veranos juntos cada año en la casa de la playa que sus familias comparten. Durante esta temporada estival, ambos planean grabar un cortometraje escrito por ella, ya que su plan es enviar el proyecto cinematográfico a la escuela de cine en la que ambos sueñan estudiar. Luego de llegar a la casa para pasar la época de calor, los amigos conocen a Igor, un jugador de baloncesto que tiene ambiciones de triunfar y se convierte en parte de su corto. Sin embargo, a medida que se vuelve en una pieza fundamental de la producción, Niko empieza a confrontar sentimientos muy complicados por Igor, pero también por su amiga de toda la vida.

¿Se basa en alguna historial real?

Tal como sucede cuando llega una nueva serie al servicio digital, muchos espectadores se preguntan si «Principiantes totales» está basado en hechos reales. En este caso, la respuesta sería «no». La serie narra una historia ambientada en una ciudad costera polaca completamente ficticia, escrita por Kamila Tarabura, Nina Lewandowska y Jędrzej Napiecek.

Tarabura también dirigió la trama junto a Katarzyna Warzecha. Mientras, las actuaciones principales corrieron a cargo de Martyna Byczkowska, Bartłomiej Deklewa y Jan Sałasiński. Si hablamos de las actuaciones, Martyna se lleva el mayor reconocimiento, interpreta a Lena, una adolescente en el espectro del autismo y tiene una puesta en escena bastante impecable, por su parte,  Bartłomiej (Niko), nos llena con su carisma y encanto y por último, Sałasiński (Igor) ha sido el que no nos logró convencer del todo.

Esta es una serie construida desde el guion de una manera muy desenfadada y ágil… no es una comedia, ni tampoco un drama; simplemente es una historia realista y compleja llena de tejidos en los personajes y en la propia narrativa.

Para finalizar… Es una buena serie, sobre todo para tener tiempo para acompañar a sus personajes en su camino hacia la madurez.

La serie limitada cuenta con un total de seis episodios que están disponibles en su totalidad en Netflix. Eso sí, debido a su contenido, solo es apta para personas mayores de 18 años de edad.

Javier Guerrero Moreno

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